A las siete de la tarde , como estabe fijado puso en la calle su Cruz de
Guía la Cruz de Mayo de nuestra Hermandad, treinta y cuatro jovenes
cargados de ilusión y comandados por los también jóvenes capataces: D.
Francisco Doval... y D. Rafael Echeverría Ramírez, a los sones de Orando
al Padre, marcha dedicada a Nuestro Titular por D. José Manuel Mena
Hervás, e interpretada por la Agrupación Musical Santa María la Blanca
de la vecina localidad de Los Palacios, empezó el discurrir del paso.
Primera chicóta típica, cargada de nervios y sobrada de fuerzas, que se
fueron templando paulatinamente con "Nuestro Padre Jesús de la Victoria"
y Cristus Vincit".
Primera sorpresa, gran afluencia de público en los inicios que fué a más
durante todo el recorrido.
El paso continua y ya en Francesa, la cuadrilla va MÁS SERENA y domina
el paso, andar más pausado y costeros asentándose. La Banda colabora con
el lucimiento a la perfección, los tambores están de adorno y se suceden
una marcha tras otra. Yo preocupado por el peso , me acerco a los
jóvenes para interesarme, increible, quieren más todavía. Ya no hay
dudas, suena a tarde grande.
Los capataces a una, a Rafael le toca llamar, uf el martillo demasiado
alto, no importa rápidamente se organiza con Fran y se reparte la carga,
uno toca el martillo y el otro habla a los costaleros. Ya lo tenían
claro, esto es nuestro, hemos trabajado mucho y nada va a ser un
impedimento para amargarnos la tarde. Rafa se crece y demuestra que no
importa la altura cuando la afición le sale por los poros. Fran,
inteligente, ayuda sin quitarle el protagonismo. Yo lo veo claro, ya
sobro allí. Esta dominao.
En la Plazoleta el gentio es considerable y "Rocio del Cielo" suena
impresionante, la Banda se crece y los costaleros se gustan. De la misma
manera en las Hermandades de la Estrella y Santo Entierro y el paso por
la calle "Real", apoteósico entre la multitud, ya los costaleros no
permitían la licencia a la banda ni de tocar un poco el tambor antes de
apuntar la marcha, automáticamente se quedaban sobre los pies dejando
caer un poco los costeros pidiendo guerra. La banda no le va a la zaga y
rápidamente coge el envite. El pique sano está servido, todo el mundo
disfruta.
Aprovecho entre tantas emociones para mirar a mi alrededor: los relevos
preparados en su sitio establecido para entrar, acompañados por
costaleros de los pasos de Nuestros Titulares preocupados para que los
costales vayan en su sitio, están con ellos desde la seis de la tarde
ayudando y arropando.
Las caras de satisfacción de los padres de los jóvenes costaleros para
enmarcar, cuántos cuídámelo que va ahí debajo pude escuchar. Los crios
de la comitiva disfrutando y llenando las calles de vida, hasta nuestro
antiguo capataz mayor, ( como los toreros, morirá capataz) dando vueltas
alrededor del paso a menudo y pendiente de todo. No lo puede evitar. Qué
buena tarde eché con Rafael Plaza y con Jesús Perea. Juan y Francisco
Lozano con la caña, paso encendido toda la tarde, Manuel Sánchez
arrimando agua para los costaleros, los capataces del Misterio Manuel
Pérez y Antonio Román al quite y al Hermano Mayor le faltaba el babero,
no cabía más gozo en una cara.
Imaginaros con este panorama el paso por Santa María Magdalena, suena
"Perdona a tu pueblo", Rafael Plaza se sale del pellejo y los niños lo
bordan, luego "Resucito", más de lo mismo. Miro el reloj, vamos tarde,
me acerco a la banda, se lo hago saber, respuesta: Sin problemas y
añaden, ¿qué tocamos ahora?. Ojú, vaya tela, la apoteosis está servida.
Antonia Diaz con el paso ya asentadito. !Qué me gusta un paso asentao!,
para llegar por segunda vez a la Plazoleta. Imaginaros, la cuadrilla
que va debajo vive sus últimos momentos bajo el paso, para dejar sitio a
los compañeros que harán entrada, las marchas se suceden, aplausos a
cada momento, ánimos por los costeros y los "niños" formando el taco.
Capataces en su sitio serenando y sabiendo hacer.
La calle Anibal González ,un hervidero. Entra por la esquina con "A la
Gloria", !bien trabajá esa revirá!, "Rocio del Cielo" y "La Saeta" para
encarar la puerta. Todo ha pasado en un momento, en un aplauso continuo,
las levántas al cielo perfectas, y los costaleros echando el resto.
No contentos con todo lo hecho se permiten la licencia de entrar con
"Alma de Diós", !Ay, cuántos recuerdos en una marcha!, el paso entra y
vuelve a salir en varias ocasiones sucediéndose cambios a la perfección.
Suena el himno, cuerpos derechos, lentamente paso atrás para dejar el
paso en su sitio hasta el año que viene. Son las 22.30. Aplauso interminable.
Para enmarcar.
Salen los costaleros, abrazos con los copañeros y capataces, no es para menos,
orgullo merecido en las caras. Foto de familia y refrigerio.
Enhorabuena a los capataces y la cuadrilla de jóvenes por habernos hecho
disfrutar tanto. Cuidaremos el grupo, no os quepa duda, vuestra es la
responsabilidad en un futuro no muy lejano de llevar a Jesucristo Orando
en el Huerto, su madre la Virgen de los Dolores y María Santísima del
Rosario.
Rematamos la noche con el discurrir de las cruces de mayo de Jovenes
Cofrades y Prendimiento por nuestra Casa Hermandad, ambas en un gesto de
señorío giraron sus Cruces hacía la nuestra que ya descansaba en su
interior.
Broche de oro arriba tomando una copa con amigos y amigas, de esos ratos
de Hermandad que se echan de menos.
MERECE LA PENA.
Fernando Gutiérrez Luna
Fotografías: José Manuel Jurado, Antonio Román y Fernando Luna.